Como comenté hace poco en otra entrada, una de las primeras editoriales que se apuntó a la fiebre d20 fue AEG.La casa norteamericana se había hecho un lugar entre las editoriales grandes con dos éxitos, La Leyenda de los Cinco Anillos y Séptimo Mar. a mi parecer dos de los mejores juegos de la década de los 90. Cuando apareció la tercera edición de Dungeons & Dragons con su OGL, no dudó ni un segundo en ponerse a producir material. Además de los Adventure Keep AEG empezó a publicar suplementos temáticos para explorar diversos aspectos que el propio Dungeons & Dragons no tocaba o profundizaba poco.
En aquella época todo era válido ya que, y me perdonaréis el símil, como
enfermos que éramos muchos de nosotros comprábamos cualquier cosa que
llevase el sello d20 sin importarnos mucho la calidad del producto.Algunos de los contenidos eran interesantes, pero otros no eran más que darle una vuelta de tuerca más al sistema poniendo nuevas dotes y nuevas clases de prestigio.
En total se editaron una veintena de suplementos. La recientemente desaparecida Factoría de Ideas sacó varios en nuestro país. Recordad que en aquellos años parecía que nadasen en dinero, y publicaron tanto La Leyenda de los 5 Anillos, Séptimo Mar y los Adventure Keep. Puedo asegurar que Guerra, Muertos Vivientes y El Mal fueron editados, y creo recordad que El Bien, Dioses y Dungeons también aparecieron aunque no puedo asegurarlo a ciencia cierta.
Todo el material publicado era para tercera edición. Después AEG empezó a tener problemas económicos y sus principales juegos acabaron en manos de Wizards of the Coast, incorporando temporalmente Cinco Anillos a su linea oficial convirtiendose en el nuevo Oriental Adventures.
No me recuerdes lo de la compra compulsiva de material d20. Recuerda que yo me compraba TODO lo que tenía el logo de d20 que llegaba aquí (y eso son varias montañas). El material de AEG en general era bastante malo (Guerra y Dragones son particularmente infectos).
ResponderEliminarDe esta época para mí lo mejor que salió fueron los módulos originales de Freeport, la trilogía de Witchfire, los primeros módulos de Avalanche Press (Last Days of Constantinople, por ejemplo) y el material de Mongoose que, pese a su horrendo diseño gráfico y sus ilustraciones infumables, era de una calidad sorprendente.
Si, y Malhavoc Press también. La fiebre d20 salvó el mercado del rol por mucho a que los "narrativos" lo nieguen y permitió a muchas editoriales sacar material que de otra forma no hubiese aparecido. Habia cosas malas e infectas pero también había material tremendo. Claro que la ceguera compulsiva nos impedía distinguirlo XDD
EliminarEl de guerra es un suplemento que me encanta, lo usamos en el Saneamiento de Kendermore en una legendaria campaña de la Dragonlance.
ResponderEliminarLa primera parte del suplemento me gusta por la información que tiene. De hecho me lo compré para preparar una campaña que nunca llegué a escribir... Lo malo era que muchos de los suplementos de la época no eran más que una excusa para listados de feats y prestige classes... auqnue eso jamás nos detuvo, en casa hay toneladas de suplementos.
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